El bebé hace ruidos para llamar la atención y tratará de vocalizar, se exitará cuando oiga acercarse a alguien y extiende sus brazos para que lo alcen.
Habla y ríe frente a su imagen en el espejo y también le gusta hacer burbujas.
Se hace manifiesta su timidez (e incluso miedo) frente a los extraños. Puede expresar también su rechazo ante ciertas comidas.
Como los músculos del bebe se han fortalecido, ahora puede apoyar gran parte de su peso en los antebrazos. Puede sentarse apoyándose por delante en sus brazos.. También puede extender sus manos y quedarse sentado (con algo de apoyo) durante unos minutos.
La motricidad se ha desarrollado notablemente, el bebé no solo puede tomar los objetos sino pasarlos de una mano a otra. Si tiene algo en su mano, lo dejará caer para tomar otra cosa de su interés. Puede sujetar toda clase de objetos.
El bebé responde gestualmente: hace palmas, acaricia, rasguña, golpea. Puede buscar con el tacto, el rostro de quien lo tiene en brazos y es una forma de demostrar interés.
Muchos bebés inician una etapa en la que manifiestan un especial miedo a los extraños y se aferran notablemente a su madre o la persona más cercana.
Que lo llamen por su nombre claramente.
Observar el movimiento de los objetos le ayudará a construir las estructuras mentales de causalidad y efecto.
Estimularlo a que levante el abdomen del suelo, paso previo al gateo.
Sostener al bebé para que pueda soportar su propio peso, estimulará en él el equilibrio necesario para caminar.
Ofrecerle alimentos en trozos que el bebé pueda sostener con sus propios dedos.