Es parte de la rutina cotidiana el manter limpio al bebé. Esto a menudo puede ser una preocupación para papás con poca experiencia.... hay quienes puedan sentir temor a causa de tener que manipular un bebé tan pequeño. Veamos algunos consejos:
Asegurérse de que el agua sea tibia al tacto, evitando el agua muy fría, que podría hacerlo tiritar, o muy caliente, pudiendo lastimar la delicada piel del bebé.
Una pequeña dosis de jabón es suficiente para lavar a un recién nacido. Esto se irá modificando a medida que el bebé crece.
Tratar de que la piel de bebé permanezca expuesta el menor tiempo posible, porque estar desnudos no parece ser agradable para los pequeños.
Es buena idea calentar una toalla grande y suave sobre un radiador (no excesivamente caliente) y tenerla preparada para envolver al bebé cuando el baño haya terminado.
Hay bebés que temen al momento del baño... ¿qué puede hacer para ayudarlo? Si el bebé se asusta, jamás se debería obligarlo a permanecer en el agua, siempre se puede volver a intentarlo algunos días más tarde utilizando la menor cantidad posible de agua en la bañera. Mientras tanto, puede higienizarlo utilizando una esponja.
Hacer del baño una instancia de juego, es una buena idea para superar el temor. Introducir juguetes en la bañera y estimularlo a jugar puede ayudarlo a perder el miedo al agua. Estimular el chapoteo aun sin introducirse en la bañera es otra de las posibilidades. Pero nada es tan efectivo como tener mucha paciencia y respetar los tiempos del bebé.